El Juzgado de lo Mercantil nº 1 de Burgos ha declarado en concurso de acreedores conjunto a las mercantiles del grupo industrial STinser, dedicado a la gestión integral del suministro de acero. Las afectadas son Stinser Suministros Integrales del Acero, Mecánica Láser, Lualán Gestión y Stinser Logística y Manutención. Todas las sociedades enclavadas en Miranda de Ebro (Burgos) y con una facturación próxima a los 20 millones de euros son propiedad del empresario José Ángel González Arias, su fundador y consejero delegado. En este video explica su negocio en detalle.
El Grupo Stinser se fundó en el año 2009 como una start-up industrial con capital familiar de sus fundadores. Desde el inicio del proyecto empresarial, se ha recibido el apoyo de grandes entidades por su labor de reindustrialización y desarrollo sostenible, así como por su contribución a la innovación del sector. Caixa Capital Risc apoyó a este grupo siderúrgico desde sus inicios y se incorporó como socio en 2013. También contó con las ayudas de la sociedad de capital riesgo Ade Capital Sodical, gestionada por Ade Gestión Sodical, para iniciar la exportación a países europeos.
“Soy de los que opinan que un emprendedor industrial en el fondo es un romántico. Uno no levanta una fábrica para hacerse rico y retirarse a los sesenta años, que no estaría nada mal, sino que su sueño es disfrutar con su trabajo a pesar de todos los obstáculos y, en mi caso pesa mucho ese objetivo, generar empleo y contribuir con el motor económico del país”, escribía González Arias justo hace un año bajo el titulo Empresario, ¿loco o visionario?
Abocado al concurso de acreedores colectivo
Pese a sus buenas intenciones el grupo STinser se ha visto abocado a este concurso de acreedores colectivo . Ni González Arias ni la Administración Concursal designada han querido explicar a La Celosía como se ha llegado a esta grave situación financiera. “Cuántas veces me habrán llamado loco; ya he perdido la cuenta. En plena crisis y embarcarnos en la creación de una empresa, para más inri en el sector industrial”, profetizaba el empresario.
E el grupo STinser que empezó con un capital social de 3.001 euros a finales de 2009, contaba con más de 4,5 millones de euros de capital social en octubre. “La financiación ha sido la asignatura más dura, con muchos obstáculos y pocas satisfacciones. No estamos en un país con tradición de búsqueda de inversores”, reconoce el empresario.