La ambición de Bill Gates por controlar y refundar a nivel mundial el sistema de salud lleva a su fundación a copar, con el apoyo de otros multimillonarios, puestos estratégicos, denominados eufemísticamente ‘comisiones de servicio’ dentro de la Organización Mundial de la Salud (OMS). La Fundación Bill y Melinda Gates es el mayor financiador no estatal de la OMS. Su aportación anual, que supera los 200 millones de dólares, ha obligado a reconocer a ejecutivos de la Organización que su influencia en las áreas de salud “corre el riesgo de sofocar los diversos puntos de vista de otros expertos de la comunidad científica”. Sus generosas donaciones no son ajenas al nombramiento de un directivo de la fundación como gerente de operaciones del programa y gestión de clúster de la polio de la OMS. La Iniciativa de Erradicación Mundial de la Poliomielitis, apoyada por Gates, elabora una estrategia para la eliminación total de esta enfermedad en 2018.
La Fundación Naciones Unidas, creada y presidida por el multimillonario Ted Turner, ha colocado a otro alto cargo como estratega senior, con un contrato de dos años, en el departamento de la directora general de la OMS, la doctora Margaret Chan (en la imagen detrás de Gates). A pesar de su nombre la fundación de Ted Turner no es un organismo dependiente de la ONU a la que apoya en sus acciones, sino una organización benéfica registrada en los Estados Unidos. Gran parte de sus ingresos proceden de la Fundación Bill y Melinda Gates. Entre 1999 y 2014 le concedió 231 millones de dólares en donaciones, para proyectos en las áreas de la salud y la agricultura. De esta forma Bill Gates cuenta con un ‘testaferro de lujo’ en las mismas entrañas de la OMS. Pero los tentáculos de Bill Gates dentro de la OMS se extienden a otras organizaciones. Management Sciences for Health, que ha colocado un ejecutivo en la Secretaría de la Alianza contra la Tuberculosis, reconoce entre sus donantes a la fundación del matrimonio Bill y Melinda Gates.
El sistema de alerta y respuesta de la OMS
ante las epidemias es calificado de ineficaz
por el filántropo Bil Gates
Ambos empresarios y filántropos pueden concurrir en conflicto de intereses e influencia indebida del sector privado en la OMS, según revela Red del Tercer Mundo. Sin embargo, sus asesores jurídicos argumentan que de acuerdo con la Secretaría del Organismo, las comisiones de servicio están sujetas a la declaración de interés para el personal. Pero el alcance de esta declaración de interés se limita al personal individual y no tiene en cuenta la institución de la cual viene la persona.
En abril pasado, La Celosía informaba como Gates planteaba la creación de una nueva Organización Mundial de la Salud, en caso de no poder refundar la actual, “para responder con eficacia a futuras epidemias”. El multimillonario calificaba entonces a la OMS de ineficaz -especialmente, por falta de presupuesto y personal-, para coordinar un sistema de alerta y respuesta.