Las previsiones más optimistas sobre la venta de bicicletas eléctricas en la Unión Europea se han quedado cortas. Con un crecimiento de más de un 20% anual, los escenarios iniciales han sido revisados al alza. La Estrategia de Ciclismo de la UE (ECF) de 2017 pronosticó ventas anuales de 12 millones de unidades hasta 2030. Los expertos sugieren ahora que las ventas podrían alcanzar los 29 millones de unidades anuales hasta 2030.
Una serie de factores encadenados contribuyen al boom que vive el mercado de las bicicletas eléctricas. A la apuesta por un estilo de vida más saludable se ha unido la lucha contra la contaminación del automóvil. Una prestigiosa revista científica analiza las ventajas económicas de este liviano medio de transporte. Cada kilómetro conducido en automóvil incurre en un costo externo de 0,11 €, mientras que el ciclismo y la caminata representan beneficios de 0,18 € y 0,37 € por kilómetro, según publica sciencedirecte.
La apuesta por la movilidad en las grandes ciudades con la construcción de grandes circuitos para ciclistas ha explosionado este mercado. Pero aún quedan otras ventajas que ofrecer frente al transporte tradicional: las bicicletas de carga y la movilidad compartida. El Uber de la bici ya funciona en muchas ciudades europeas. Bruselas es una de las ciudades pioneras en implantar Jump, filial de los que explotan con éxito, pese a las virulentas protestas de los taxistas, el coche compartido.
Los empresarios de la bicicleta empiezan a preguntarse ¿por qué hay tanta subvención para los coches-e, cuando claramente la gente preferiría comprar e-bikes? Argumentan que dada esta preferencia, se debería gastar más dinero en infraestructuras para alentar aún más las bicicletas como transporte diario.
El ciclismo, entre la digitalización y
los nuevos modelos de negocio
El lobby Cycling Industries Europe (CIE) responderá a los desafíos empresariales necesarios para cumplir y defender las cifras de crecimiento. En su evento político “Ciclismo Industrias 2030: tomar la iniciativa en la nueva movilidad”, expertos del CIE debatirá las proyecciones de ventas de la UE con funcionarios de la UE, ECF y otras partes interesadas.
Esto incluirá paneles de expertos en los temas de digitalización del ciclismo y nuevos modelos de negocios y oportunidades financieras, tales como el arrendamiento de flotas comerciales a través de bancos y planes de seguros. Todas las empresas y responsables políticos interesados en el sector de la movilidad están invitados a asistir a la conferencia, que tiene lugar en Bruselas con representantes de alto nivel de la Comisión Europea.
“Las cifras futuras de ventas de bicicletas eléctricas dependerán en gran medida de qué tan amigable sea el ambiente. El escenario óptimo implica que Europa se convertiría en un paraíso para el ciclismo, con inversiones de estilo holandés en infraestructuras seguras y cómodas, un entorno regulatorio que priorice el uso de bicicletas y, quizás el más desafiante, al administrar adecuadamente el uso del automóvil privado en ciudades y ciudades. Pero los gobiernos y los defensores deben saber que la industria mantendrá las inversiones en innovación para mantenerse a la vanguardia de las muchas formas alternativas de micromovilidad que podrían llegar”, advierte Adam Bodor, director de Incidencia de ECF.