Desde el 24 de noviembre, cualquier ciudadano puede tener acceso a los documentos de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), tanto a los que versan sobre medicamentos para uso humano como animal. En el formulario de la web, se le pedirá que proporcione su nombre, el de su empleador o una organización, datos de contacto y el objeto de su investigación. Pero estos datos formales no imposibilitan el libre acceso a todo el mundo. Con este fin la EMA ha publicado una guía práctica que detalla el proceso para solicitar el acceso a los documentos no publicados en poder de la Agencia. La solicitud debe hacerse en inglés que es el idioma oficial de trabajo.
El interés público primará sobre
los intereses comerciales
La Agencia rechazará el acceso a un documento cuya divulgación suponga un perjuicio para la protección de interés público en materia de seguridad pública, la defensa y los asuntos militares, las relaciones internacionales, la política financiera, monetaria o económica de la Unión Europea o de un Estado miembro; así como la privacidad y la integridad de la persona, en particular de conformidad con la legislación de la UE en relación con la protección de los datos personales. También se preservan los intereses comerciales de una persona física o jurídica, incluida la propiedad intelectual, a menos que haya un interés público superior en la divulgación.
Si no se concede el acceso al documento solicitado, el ciudadano recibirá una carta de rechazo dentro de los 15 días a partir de la recepción de su solicitud (o 30 días hábiles si el plazo se amplió). Si no está satisfecho con la decisión, pedirá en otro formulario a la Agencia que reconsidere su decisión.
Las quejas al Defensor del Pueblo Europeo
Si la Agencia no da respuesta a su solicitud de confirmación, puede quejarse al Defensor del Pueblo Europeo o, alternativamente, puede iniciar un procedimiento judicial ante el Tribunal General de la Unión Europea. Como parte de su reorganización iniciada en 2013, la Agencia ha revisado su proceso de tramitación de las solicitudes de acceso a documentos, para ofrecer un servicio a medida para los solicitantes. Cada petición ahora se asigna a un coordinador de EMA que sirve de enlace con el solicitante para entender sus necesidades.
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