Una red de más de 1.300 grupos universitarios, denominada Estudiantes por la Libertad (SFL), entre cuyos asesores se encuentra el Príncipe Michael de Liechtenstein y conocidas instituciones ultraliberales como Cato y Mont Pelerin, lanzan “Fin a la prohibición”, a favor de la despenalización del consumo de drogas. La campaña se difunde en internet y llegará a más de 200 universidades de todo el mundo. El pasado abril, como informó La Celosía, la Asociación de Médicos Internacionales para Políticas Saludables en contra de las Drogas (IDHDP), a la que pertenecen médicos españoles, denunció la ineficacia de los organismos internacionales en la lucha contra la droga.
Evitar la muerte de más personas inocentes
“Fin a la Prohibición es una campaña que da cuenta del fracaso de la guerra contra las drogas y de los ejemplos progresivos de despenalización y legalización alrededor del mundo”, según explica SFL. Con esta acción educativa tratan de “evitar la muerte de más personas inocentes en manos de la violencia estatal y de los distintos cárteles que controlan el negocio”. Estudiantes por la Libertad cuentan con un staff de asesores que proporcionan recomendaciones y apoyo a la organización. Es el caso de David Boaz, vicepresidente Ejecutivo del Cato Institute que ha jugado un papel clave en el desarrollo del movimiento libertario o Linda Whetstone, presidente de la Red para una Sociedad Libre y miembro de las juntas directivas del Instituto de Asuntos Económicos, Atlas Economic Research Foundation, o la Sociedad Mont Pelerin.
“Gracias a la prohibición, el narcotráfico es un negocio en extremo lucrativo que le ha servido a organizaciones terroristas como las FARC y Al-Qaeda para financiar sus operaciones delictivas. En el caso de las FARC, se estima que el narcotráfico representa más del 60% de sus recursos. Y en el caso de Al-Qaeda, el narcotráfico y los secuestros constituyen su financiamiento principal. Además, estos grupos suelen ser socios comerciales en el tráfico de drogas y armas”, señalan desde Estudiantes por la Libertad. Esta organización afirma que la obsesión de los países por combatir a las drogas ha deteriorado la buena gobernanza, con el resultado de mayor corrupción y un débil desarrollo económico provocado “por el desvío de fondos que pueden destinarse hacia otras áreas”.
Una veintena de empresas competirán por producir cannabis en Uruguay
Una veintena de empresas, la mitad extranjeras, se presentaron al llamado del gobierno uruguayo para producir marihuana que será vendida en farmacias, última etapa de la ley que legalizó el mercado local de cannabis, informó ayer el Instituto de Regulación y Control del Cannabis (IRCCA). El gobierno uruguayo contabilizó “un total de 22 interesados, 8 Nacionales, 10 Extranjeros y 4 de integración Mixta”, indicó un comunicado del IRCCA. Ahora, el instituto dispondrá de hasta 15 días realizar una valoración técnica y seleccionar a un máximo de cinco postulantes a los que otorgará una licencia, por hasta cinco años, para producir y distribuir entre una y dos toneladas anuales de cannabis psicoactivo para su venta en farmacias.
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