Hasta en cinco proyectos de investigación, tildados de rigurosamente de neutrales, la nutricionista Paulette Goddard (que firma como Marion Nestle) ha descubierto la influencia de las multinacionales que los financian. Su prueba del algodón debería sonrojar a los investigadores que los firman. “Una vez más, estoy publicando cinco estudios patrocinados por la industria de alimentos, con resultados que salen sólo en la forma que el patrocinador quiere. ¿Coincidencia? O algo más serio? Estoy tratando de mantener una actitud abierta. Si usted sabe de la investigación patrocinada por la industria de alimentos que no favorece los intereses del patrocinador, por favor enviar”, ironiza Paulette Goddard (Marion Nestle), profesora en el departamento de Nutrición, Estudios Alimentarios y Salud Pública en la Universidad de Nueva York.
La Sociedad Americana de Nutrición recoge un trabajo sobre si el consumo de jugo de naranja puede mejorar el sistema de defensa antioxidante, realizado por varios investigadores españoles, en virtud de un contrato de investigación suscrito entre la Universidad de Granada-Empresa Fundación General y Coca-Cola, propietaria de Minute Maid y Simply Orange (en la imagen Muhtar Kent, presidente de la multinacional en un acto promocional). El objetivo fue evaluar los efectos de la ingesta de zumo de naranja sobre el sistema de defensa antioxidante, biomarcadores de estrés oxidativo y signos clínicos del síndrome metabólico en 100 personas no fumadoras que tenían sobrepeso u obesidad. La conclusión de los investigadores es que la ingesta de zumo de naranja contribuye a la reducción de peso corporal en adultos no fumadores con sobrepeso u obesos.
Proyectos de investigación tras los cuales
se observa la mano de los patrocinadores
La nutricionista norteamericana destaca otros cuatro proyectos de investigación tras los cuales se observa la mano de los patrocinadores. Uno sobre las dietas con queso y carne como fuentes primarias de APS (ácidos grasos saturados) causa superior de colesterol. Lo financian la Fundación Dairy Investigación, el Ministerio Agricultura y el Consejo de Alimentos de Dinamarca, el Instituto de Investigación de Lechería (Estados Unidos), los Productores Lecheros de Canadá y otros productores de queso y lácteos de Francia, Australia y Países Bajos). El estudio fue aleatoriamente cruzado y realizado con la colaboración de 14 mujeres posmenopáusicas con sobrepeso. Se proporcionaron tres períodos de dieta completa de duración de dos semanas separados por períodos de lavado de dos semanas. Los resultados favorecen a los patrocinadores.
Los otro tres trabajos de investigación tratan sobre el consumo excesivo de azúcares que contienen fructosa, la incidencia del azúcar en la salud y nuevamente la fructosa. Los patrocinaron PepsiCo Internacional, Coca Cola, Kraft Foods y otros gigantes de la industria alimentaria. La conclusiones contentaron a los patrocinadores.
La ‘compra de científicos’ por Coca-Cola
en el New York Times
Hace escasos días, un blog del New York Times revela la ‘compra de científicos’ por Coca-Cola para exculparse de su responsabilidad en el aumento de la obesidad. El mayor productor mundial de bebidas azucaradas, está apoyando una nueva solución “basada en la ciencia” a la crisis de la obesidad: para mantener un peso saludable, hacer más ejercicio y preocuparse menos por la reducción de calorías.
El gigante de las bebidas se ha asociado con los científicos influyentes que están avanzando este mensaje en revistas médicas, en las conferencias y a través de los medios de comunicación social.Para ayudar a los científicos a ‘correr la voz’, Coca-Cola ha proporcionado apoyo financiero y logístico a una nueva organización sin fines de lucro llamada Red de Balance Energético Global, que promueve el argumento de que los estadounidenses preocupados por su peso están demasiado obsesionados con la cantidad que comen y beben mientras no prestan suficiente atención al ejercicio físico. La lucha contra el sedentarismo ha sido el caballo de batalla de Coca-Cola para desviar la atención sobre los efectos en la dieta de sus bebidas azucaradas.